Un negro en la casa blanca...

Resulta curioso el contraste de colores, a Black President in the White House. Lo que debería ser un simple juego de palabras en los titulares del día siguiente a las elecciones, no parece un tema baladí. Cuando escribo estas líneas se acaba de hacer público en la prensa online que han sido detenidos en EEUU dos neonazis que planeaban asesinar al candidato demócrata, no precísamente por sus discrepancias en la política fiscal que defiende Obama. Es desconsolador conocer que entre nuestra sociedad aún existe gentuza que no puede permitir que un negro comande los designios del país más influyente del mundo. Aquí no hay ideologías que valgan, si McCain hubiera nacido en una familia afroamericana, no duden que hubieran ido a por él. En esto de la tolerancia racial, se ha avanzado bastante, pero el camino a recorrer es aún más largo que el andado.

Las polls americanas parecen dar una clara ventaja en votos al candidato Obama para las elecciones americanas, sin embargo, los Elefantes (símbolo del partido Republicano) no dan la batalla por perdida, se aferran a un efecto sociológico típicamente americano, el efecto Bradley. Se conoce así al fenómeno según el cual los candidatos afroamericanos suelen tener mejores resultados en las encuestas preelectorales que en las urnas. Lo explican como un cúmulo de prejuicios, aún instalados en la sociedad americana, por los que el hombre de clase media recela de la tez negra como patrono de la nación a la hora de depositar su papeleta en la urna. Será un efecto sociológico, pero un efecto racista al fin y al cabo. Desde este blog, todo el apoyo al candidato Barack Obama como próximo presidente de los EEUU. La humanidad necesita un cambio, un cambio de color.